En conferencia de prensa, la fiscala Verónica Simesen sostuvo que las cámaras de seguridad registraron el momento en que Ramiro Sagasta compraba combustible el día que murió, cuando andaba en bicicleta por ruta 28. Aún así, no descartó la intervención de terceras personas en la muerte provocada por quemaduras en el 90% de su cuerpo.
Por su parte, el procurador general de la provincia, Pedro García Castiella, sostuvo que “se observa una modalidad criminal inusual que tiene que disparar las alarmas”, con referencia a los últimos crímenes que se registraron en la zona centro de la provincia, y dijo que esto obliga a calibrar la forma de trabajo y abordaje de la investigación criminal.
Respecto de los supuestos suicidios el titular del Ministerio Público Fiscal dispuso que primero se debe descartar el presunto homicidio a través de la investigación.