Churrito, el tradicional carrito de venta de churros de El Challao, hoy convertido en un pequeño local, reclama a la Municipalidad de Las Heras por su continuidad, luego de que la comuna intempestivamente les advirtiera de su clausura para dentro 5 días.

Mario Sánchez, propietario de El Churrito, detalló el convenio que lo ampara para usufructo de su emprendimiento: desde 2015 cuenta, por convenio con Las Heras, con una concesión por 10 años, con posibilidad de prorrogarlo por 10 años más.

“Quiero que me dejen laburar”, resumió Mario, defendió los puestos de trabajo de sus cinco empleados y, al mismo tiempo, dio precisiones del convenio vigente con la Municipalidad y de los requisitos que le exigen para fundamentar su clausura y cierre.