El tecladista, compositor, cantante y productor Marcelo Moura, miembro fundador de la banda de rock argentino Virus, un proyecto estético que sigue en pie desde 1978, justificó esa permanencia en el hecho de que “tocar es lo que es nuestra vida y es siempre un placer”.

A los 64 años y con más de cuatro décadas trajinando escenarios, el artista sostuvo que para poder sostener semejante actividad “tenés que tener una conducta y una disciplina mucho más estricta porque lo lindo es sentirte bien arriba de un escenario”.

En diálogo con Nicolás Pauls para el programa Interior, el músico subrayó el tipo de propuesta que Virus ha mantenido como marca a la hora de tocar en vivo.

“Técnicamente las exigencias nuestras son muchas, lo nuestro es muy complejo y cada vez que tocamos la prueba de sonido es más larga que el show”, ejemplificó.

En la charla con Pauls y a cuento de "Virus, por Marcelo Moura" (libro que publicó hace una década), Moura recordó que Virus fue el primer grupo de rock argentino en llegar a Chile en tiempos de la dictadura de Augusto Pinochet.

“Entre los militares, que eran los que gobernaban, y la Iglesia, que es muy poderosa allá, hicieron una apuesta entre comillas, de decir ‘los vamos a traer y los vamos a exponer al 100% para que la gente sepa que los rockeros son personas de cuarta’ y se encontraron con la sorpresa de pensar que íbamos a llegar un grupo de descerebrados y éramos más cultos que los censores”, subrayó.

En relación a la censura y el uso de las metáforas, Moura apuntó:

“La música y las letras no se explican. Cuando uno compone un tema, lo hace público. Ya deja de ser de uno y la gente que lo escucha lo interpreta a su manera y me parece que esa libertad es esencial y genera una interacción donde entre el que escucha y la canción y se crean cosas que son geniales y que uno nunca las hubiera imaginado”.