Luego del último informe de pobreza que reveló el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para la infancia (Unicef), el cual reveló que en Argentina hay 5,6 millones de chicos en la pobreza, de los cuales 1,3 millones sufren hambre, el ministro de Desarrollo Social de la provincia, Gabriel Yedlin, pidió a la Nación subir la Asignación Universal por Hijo. “La AUH ha sido una política sumamente inclusiva, quizás la más inclusiva del gobierno anterior. Operativamente es el camino más adecuado para poder llegar a los grupos más pobres y protegerlos de la indigencia. El valor (el monto que se paga) debe ser igual a la posibilidad para que la gente de este grupo pueda comer. En la Argentina los grupos más vulnerables tienen más de dos hijos. El Gobierno tiene la potestad de cambiar los aumentos que se otorgan por año (para aumentarlo). La gente tiene que comer”, pidió el funcionario tucumano.