La acusación sostiene que se habían organizado y no dejaban pasar a otros taxistas en el e aeropuerto Córdoba.

Se realiza en los Tribunales II, en la Cámara 1º del Crimen el juicio contra 13 choferes y propietarios de taxis, acusados entre las figuras más gravosas de asociación ilícita. Entre ellos, el acusado de ser el cabecilla de la banda, Francisco Dómina. Su abogado, el Dr. Claudio Orosz, sostuvo, a poco de iniciarse la audiencia, que “pudo haber amenazas y golpes pero no asociación ilícita”.

En diálogo con la Radio de Todos, Orosz indicó que “la perspectiva es que tenemos presos de 2 años y seis meses en base a una figura que roza la inconstitucionalidad, como es la asociación ilícita, que en este caso ha sido aplicada sin ningún tipo de prueba y por el clamor que había por parte de la población canalizada a través de los medios de comunicación, respecto a la supuesta existencia de una serie de hechos que también se van a tramitar en esta causa”.

Orosz cuestionó la figura de asociación ilícita que pesa sobre su defendido, ya que “según la Corte Suprema, para que haya una asociación ilícita tiene que haber 3 o más personas, organizadas de tal manera que diseñen futuros e indeterminados planes delictivos. En este caso no se encuentra ni siquiera dicho esto y mucho menos probado”.

El juicio se prevé de una extensa duración y se espera que declaren 70 testigos.