Por Daniel Corujo -
La difusión de las imágenes del avión francés, a todo lujo, que llevará de un lado al otro al seleccionado argentino pareció desubicada y fuera de tiempo.
En un país donde muchos ciudadanos comunes tienen problemas económicos a la hora de pagar los servicios básicos (agua, luz y gas), que los jugadores viajen como jeques arábes, los aleja más del hincha de fútbol normal que, cuando va a la cancha, orina contra la pared en baños que, en muchos casos, carecen de limpieza mínima.
Obviamente nadie va a pedir que los futbolistas viajen en clase turista. Que lo hagan en business o en primera. Lo otro, ya, es demasiado lujo. Cuando el Presidente de la Nación, Mauricio Macri, viaja a sus giras en el exterios, por ejemplo, elige viajar en aviones de línea.
Este avión 6 estrellas para jugadores que con el seleccionado aún no han ganado nada y que ahora tienen como estrategia la frase "no somos favoritos", se pagará con lo que AFA cobre del amistoso en Israel y de FIFA por participar en el Mundial.
La misma AFA que tardó meses en poner en algunos estadios del ascenso colchonetas de protección en las paredes cerca de las lineas laterales para que no se lastimen los jugadores. Claro, antes debió morir un futbolista...
Supongo, por el discurso del entrenador Sampaoli, que él debió oponerse a todo esto. Ah... ¿No? Y bueh...
O que los millonarios jugadores aportaron de sus bolsillos para pagar parte de los gastos del avión. Ah... ¿Tampoco? Mala mía.
El seleccionado ya se despidió de los argentinos y, sabiendo el alto grado de desenamoramiento que tiene con el público (se salva Messi y algún otro), viendo los lujos con los que son atendidos, se los va a exigir más aún.
Y si pierden, juegan mal o no logran los objetivos mínimos volverán las acusaciones de jugadores que "no tienen hambre".
Si ganan, digno de argentinos, se los elevará a estos futbolistas al nivel de San Martín y Belgrano y todo quedará en el olvido...
Esto es el Mundial. Y lo puede todo.
Etiquetas: corujo, Rusia 2018, Selección Argentina