Lorena Lolu Menayed es la hermana mayor de 3 varones que admira su iniciativa y empuje para hacerse un lugar en la escena electrónica nacional. Bohemia desde la cuna por haberse criado en las tribunas de Villa Crespo, su carrera como dj y productora arrancó allá por el 2009. Desde entonces no ha parado de crecer y dar vueltas no sólo por cabina de nuestro extenso y frondoso país, sino también con algunos destinos reiterados en latitudes remotas del globo terráqueo.
Lolu es testigo fiel y protagonista de cómo el circuito fue cediendo en su resistencia a la entronización de artistas femeninas, que si bien aún es desigual en cartel, remuneración y número, ya son una tangible y estimulante realidad en plena ebullición. Lolu es una domadora de bandejas que mantiene a rienda firme a su tropa de danzarines, cada vez que le toca subir los remos de su mixer.
Baila y toca para ella en primer lugar. Se la ve conjurando sus temores a pleno golpe seco de patada en sus enlaces. A pesar de ser dueña de una personalidad muy sensible y permeable al que dirán, parece haberlo olvidado todo en el momento de comandar su propia ceremonia musical. Se auto hipnotiza para hipnotizar. Se auto define como auto exigente.
Su infancia y adolescencia se dedicó a competir en el mundo de la gimnasia aeróbica lo cual le consolidó una noción de disciplina que tiene muy a mano siempre para cualquier cosa que emprenda.
Lolu es dueña de su propio sello discográfico (44 cupids Records) mediante el cual ha editado un ep recientemente e incluso tuvo otro (Dighop Records) con el que imprimió vinilos.
Quien labra estas lineas la conoce desde el llano y podría aventurar que esta suerte de dj Cleopatra con perfil egipcio, echa fuego con sus mezclas y derrama lágrimas al terminar. Será que hace 14 años que se viene abriendo paso entre varones del mainstream comercial, a pura magia, paciencia y tolerancia. Discípula de la escuela Arjaus donde entre otras cosas se inició en el arte de enseñar ha regado el circuito con casi un centenar de alumnos que hoy la observar desplegar esa impronta irreverente inversamente proporcional a su serenidad habitual.
Lolu pertenece a una generación que apostó a vivir de, con, por y para la música electrónica y que a esta altura lo está logrando sin dudas. La competencia se equilibra con la buena onda y el compartir que prolifera en el ambiente. Todos quieren llegar pero también Lolu entiende que “hay para todos y todas”. Aunque se declara algo insegura lo dice con tanta convicción que parece tener cierto coraje al admitir una debilidad. Años de indagar en el auto conocimiento le han ayudado a convivir con una tolerancia a la frustración que lejos de inmovilizarla la han hecho insistir hasta este presente en el que puede elegir dónde y con quien tocar. Si bien una agencia le programa la agenda de shows y giras, sus primeros años fueron con el cuchillo entre los dientes arreglando ella misma sus actuaciones sin depender de nadie. No niega la tentación que existe en compararse con otras y otros artistas de su generación, pero ya ha comprobado que lo mejor es seguir hacia adelante sin perder el foco de que la única competencia es contra ella misma, contra su versión anterior y contra los comentarios que hubieran propinado sus colegas intentando bajarle el precio a su talento.
En ese campo minado de prejuicios es que Lolu templó las armas para salir a escena. Incluso admite estar en plena batalla para dejarse llevar y rebelarse a su propia cabeza que por supuesto no es más que una computadora o el instrumental de vuelo que ayuda a procesar información y calcular decisiones, pero no la pilota. Repite para ella misma este casi mantra “la queremos a la cabeza, pero con lo justo y necesario”.
Pasen y escuchen esta verdadera masterclass de Lolu Menayed en Tripulante de Cabina.
Tripulantes de Cabina con Camilo García, domingo de 2 a 3hs
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Etiquetas: Camilo García, Lolu Menayed, Tripulantes de Cabina