Luis Bremer charló con Martín Epstein, economista de CEPA sobre la situación entre salarios e inflación.

“El anuncio de los 112 mil pesos para no caer en la pobreza es una tradición del índice del 7,4 por ciento de inflación de julio, que da lugar a dos canastas, la canasta básica alimentaria y la canasta total, que marcan las líneas entre pobreza e indigencia, estamos en una situación dramática en la relación entre ingresos y necesidades, sobre todo alimentaria.”

“Ésta inflación es muy difícil de bajar y no hay forma en que los salarios le ganen a la inflación, ni siquiera los trabajadores registrados, con paritarias abiertas, no llegan a empatarle a la inflación, en general vienen perdiendo.”

“Todos los sectores informales, que no tienen esos derechos laborales, cómo pueden recuperar poder de compra es una cuestión que el Estado tiene que encarar, el aumento a jubilados y pensionados, los empleados públicos, con la dificultad que el acuerdo con el Fondo Monetario no permite el aumento del gasto.”

“Estamos con un nivel de empleo en crecimiento, que no garantiza pasar por encima de la pobreza, pero siempre es mejor pelear desde un empleo alto que con un desempleo alto, el gobierno podría aumentar el salario básico universal, o que implicaría o renegociar el acuerdo con el Fondo o encontrar fuentes de financiamiento, cosa que la oposición no comparte, no permite esa discusión.”

“Veo en Massa al menos la posibilidad  de una mayor coordinación, pueden aparecer una serie de medidas que intenten  acomodar un poco la diferencia entre ingresos e inflación, pero no va a ser fácil de resolver, al menos en el corto plazo.”