“90 años, 17 mundiales vistos, pero como ser humano es superior a lo que entrega como periodista deportivo”, lo recibió Adrián Noriega en Nunca es tarde antes de preguntar “qué se hace para ser un poquito Macaya, cómo uno puede llegar a los 90 con la vitalidad que vos tenés”.
A lo que Macaya respondió: “La vitalidad la alimenta el entusiasmo, las ganas, la pasión que uno siente por lo que hace. Por otro lado –continuó-, el apetito por el conocimiento. Pero conceptualmente, uno tiene que mirarse hacia adentro, saber arrepentirse de los errores que ha cometido, y no es tan difícil, sinceramente”.
Consultado sobre si se veía cubriendo su Mundial número 18, en 2026 en Estados Unidos, México y Canadá, afirmó: “Sí, estoy cerca”, y recordó su primera cita en el Mundial de Suecia, en 1958.
“Te digo la verdad: viajar a Suecia, así como fue una sorpresa, se fueron encadenando los distintos mundiales”, dijo, y recordó “las circunstancias que uno tuvo que manejar, ni una gripe, ni un resfrío, ni un estornudo, son muchas cosas que se dieron, tiene que ver con lo afortunado, va más allá de lo que podemos merecer”.
Hace pocos días participó de un homenaje al programa Fútbol de Primera, en una transmisión en vivo de la que participaron los streamers Luquitas Rodriguez y Alfredo Montes de Oca.
Por último, Macaya le prometió al conductor volver al edificio de Radio Nacional, en Maipú 555. “Ahí empecé a los 15 años, hace rato que no entro”, respondió a la invitación antes de decir que sí.
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