La historia de una esclava afro-santiagueña que intentó comprar su libertad en la época colonial será narrada por el cineasta Daniel Gerez, de Santiago del Estero, premiado por el Fondo Nacional de las Artes para iniciar el guion de una serie de ficción basada en hechos reales, contó el realizador y autor del proyecto ganador.
Gerez se presentó en el Concurso de Desarrollo de Proyectos de Series de Ficción 2020 para Televisión y Plataformas Digitales, que eligió 10 proyectos titulares y 5 suplentes distribuidos en cinco regiones y fue premiado por su proyecto “El caso de Manuela González: mujer afro-argentina que pidió su libertad”.
El realizador, que buscará financiamiento para poder concretar esta producción, añadió que “la idea es preparar una serie de ficción, que es algo totalmente distinto a un documental porque es un trabajo mucho más minucioso”.
Autor de los documentales “Salavinamanta” y “Guaracha del Estero”, laureados por el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, Gerez relató a Télam que el “proyecto del caso de Manuela es el de una esclava afro-santiagueña que pidió su libertad ante la justicia” en el siglo XIX.
“La idea es hacer una serie de ficción que cuente este juicio que se le hizo aquí, en Santiago del Estero, y en donde ella tuvo voz propia, por eso llama la atención. Está basada en hechos reales y en los archivos históricos de la provincia del año 1829”, explicó Gerez.
“Hay una voz en primera persona de una esclava en los archivos, cuando no hay casi archivos de eso. Además, es una afro-santiagueña que pide comprar su libertad que sabe leer, escribir, e incluso hasta tiene conocimientos de derecho; aunque finalmente en el juicio no le conceden la libertad”, puntualizó.
“El caso de Manuela González: Mujer afroamericana que pidió su libertad” está basado en la historia real de un hecho judicial que data de 1829: una esclava afro-santiagueña pidió su libertad a un juez y no le fue concedida, hecho que quedó registrado en el Legajo 17, Expediente Nº 112, 1829, del archivo de Santiago del Estero.
“Hacia el siglo XIX el esclavo comenzó a tener 'voz' en los circuitos institucionales cuando se trataba de su emancipación; en ocasiones, lograba 'enfrentar' judicialmente a su amo, algo totalmente impensado un tiempo atrás, incluso presentando escritos ante el juez y expresando el conocimiento sobre ciertos derechos y leyes”, informó el cineasta.
El pleito judicial se produjo cuando la esclava de doña Rosa González en la ciudad de Santiago del Estero realizó una presentación ante el juez solicitando la compra de su libertad por 100 pesos, monto que habría ganado realizando trabajos extras.
En su escrito, la esclava alegó que su ama había pedido la cantidad de 150, ante lo que Manuela expresó: “… solo si quiere venderme en la cantidad de ciento cincuenta; este es un capricho mal fundado porque todo el mundo sabe que el rescate de una esclava es lo más sagrado, y que debajo de ser quiebra aún por justicia en la totalidad o el interés que se pida, en caso de libertad, y si mal no me acuerdo me parece que la ley previene que tratando de rescatarse una esclava no está obligada a dar más que las dos terceras partes de lo que el amo pida por ella”.