-En ese noviembre fatídico de 2019, los bolivianos hemos tenido un gran dolor. Se hizo un uso excesivo de fuerza contra la población. Hubo muertos, heridos, perseguidos, confinados, viudas, gente mutilada... –dijo el embajador del Estado Plurinacional de Bolivia en la Argentina, Jorge Ramiro Tapia Sainz.

El embajador se refirió en la Radio Pública a la causa que involucra al expresidente argentino Mauricio Macri y a su gobierno en el envío de armas a Bolivia para reprimir la protesta social contra el golpe de Estado a Evo Morales.

Tapia Sainz manifestó que “parecen resabios del siglo XIX, quieren colonizar en muchos lugares de América” y también lo comparó con las dictaduras de los 70 y 80 en varios países de América Latina: “No podemos repetir un plan Cóndor”.

El plan Cóndor fue una campaña de terrorismo de Estado respaldada por los Estados Unidos en países de América Latina especialmente Argentina, Chile, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia.

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Con relación a la denuncia que presentó el actual gobierno argentino contra la administración de Macri –también está involucrada la exministra de Defensa y actual líder del movimiento Juntos por el Cambio, Patricio Bullrich-, agregó: “Se ha corroborado que hay un ingreso de una nota. Es decir, no solo está la nota en el archivo, sino se ha certificado su ingreso junto a los materiales bélicos que enviaron al país. La mentira tiene patas cortas, los que hicieron cosas que no debían, tienen que estar presos".

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El material bélico puesto a disposición de la dictadura boliviana son 40.000 cartuchos AT 12/70; 18 gases lacrimógeno en spray MK-9; 05 gases lacrimógeno en spray MK-4; 50 granadas de gas CN; 10 granadas de gas CS; 52 granadas de gas HC, según denunciaron autoridades bolivianas.

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