“Trabajamos de lunes a viernes, y cada vez más, y nunca antes nos pasó que la comida no nos está alanzando”, dijo Ester Chicha Klocker, colaboradora de la parroquia de la capital entrerriana. Mencionó que siempre cocinaron para alrededor de 80 personas adultas, sin embargo en estos tiempos de crisis, son más de 100 personas las que se acercan a buscar su plato de comida.

“Es mucha demanda la que hay, y al que llega nosotros le damos de comer”, dijo y solicitó colaboración a la comunidad ya que en ocasiones lo que falta se pone por parte de las colaboradoras.

Quienes puedan acercar alimentos no perecederos a la parroquia.