La decisión fue tomada por el Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema) y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, y responde a la cantidad de incendios desatados no solo en provincias patagónicas sino también en regiones de Santa Fe, San Luis, Formosa y Misiones.
Son más de 200 los brigadistas que están trabajando en los distintos focos que se desarrollan en la Patagonia, principalmente el de Quillén y el de Lago Martin y Lago Steffen en Río Negro.
Alberto Seufferheld, director del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, afirmó que la declaración de emergencia significa que los ministerios de Defensa, Seguridad y el de Ambiente trabajen coordinadamente para asistir a las provincias.