Por Daniel Corujo, desde Nueva York-
Juan Martín Del Potro, jugando su mejor partido en el torneo, clasificó para los cuartos de final del abierto de los Estados Unidos.
El tandilense superó al croata Borna Coric por 6-4, 6-3 y 6-1. El martes jugará por un lugar en las semifinales con el potente sacador norteamericano John Isner.
Del Potro hoy hizo todo bien. Varió efectos desde su revés, controló la agresividad a Coric y estuvo casi perfecto con su servicio.
De movida quebró el tandilense. Inteligente. Le cambió los ritmos. Pegó fuerte el revés a dos manos, luego con slice y enseguida un drop. Las variantes lo pusieron 3-1.
Pero, Coric, recuperó rápido el quiebre. Con la misma fórmula. Nunca dos tiros iguales y un aprovechamiento integral sobre el error del argentino en el primer servicio.
Entonces la tribuna empezó a pedir “y pegue y pegue y pegue Delpo, pegue”. Y les dio el gusto. Del Potro la castigó de todos lados y hasta le encontró un toque de delicadeza con una volea: 6-4.
Hubo un hecho clave en la mitad del segundo set. Cuando Del Potro se pusó 4-1, el europeo comenzó a tener inconvenientes en el muslo derecho. Un par de veces el trainer de, certamen ingresó a la cancha para atender a Coric. Un vendaje aparatoso. Y de allí en más el juvenil de 21 años no fue el mismo.
El mérito de Del Potro fue no haberse ido nunca mentalmente del encuentro. Siempre es complejo tener enfrente a un rival que no está al ciento por ciento.
Juan Martín no perdonó. Cerró el match con parciales de 6-3 y 6-1 para ponerse, definitivamente, la pilcha de candidato.