Yo Soy! UNA NOCHE EN LA TIERRA

Diego Bergesio

 

 

Yo Soy! Diego Bergesio

 

Músico, autor, cantante y docente, es la voz y productor general de “Siniestra”, banda de tango urbano que traspasa fronteras con una sonoridad que profundizan en "Crash", su quinto disco.

Crash es el título de una película de David Cronenberg que tiene que ver con choques de vehículos. ¿Crash es un choque también para ustedes?

 

“Sí. Viene de ahí la palabra, pero, además tomamos esa expresión también como una onomatopeya. Tomamos ese instante en donde se chocan las energías y las emociones, donde no sabés qué va a pasar, pero seguís adelante. Tiene que ver también con reconstruirse después de ese golpe, cómo sostenerse y cómo sobrevivir y sobrellevar esas cicatrices.

 

¿Y vos qué querés comunicar? Porque estás también en una banda de rock electrónico, pero te identificás con el tango y la música rioplatense.

 

“Me fui formando. Yo era niño en los 80 pero tenía hermanos mayores que tocaban, a los ocho años estaba en los camarines de Cemento y el rock me atravesó de entrada. Paralelamente mis viejos escuchaban folklore y tango. Íbamos mucho a La Pampa. Y también a Uruguay.

Ya más adolescente me atravesó la música de Estados Unidos, el funk, el rock, la música negra, afro y ahí armamos “Inclan”.

Pero cuando ingreso a la Escuela de Música Popular de Avellaneda se me empiezan a mover otras fibras y ahí me toca el folklore y el tango. Hago un viaje al norte y me empiezo a conectar con las raíces originarias. Y hubo algo que me marcó cuando viajamos con “Inclan” a Inglaterra. Fuimos a tocar al Cavern de Liverpool, y en una zapada con unos escoceses que estaban tocando sus folklores me dijeron: “Tocate un tango”. Fue un puñal a la identidad. Y empecé a entender por qué hacía música y a meterme más en que me representara en lo identitario, el tango, el folklore y la canción”.

 

Presentan “Crash” el 2 de septiembre en el Club Atlético Fernández Fierro (Sánchez de Bustamante 772, CABA)

 

Para despedirse eligió “Buenos Aires 3000”.

 

Gracias Diego, un placer recibirte!