Así lo indicó en diálogo con Radio Nacional Gustavo Gálligo, abogado y uno de los iniciadores de la Unión de Empleados de Justicia de la Nación, además de sobreviviente de la llamada "Noche Negra Judicial" ocurrida en la madrugada de 1 de junio de 1976 en la que varios dirigentes gremiales y trabajadores de distintos juzgados fueron secuestrados y trasladados a la Superintendencia de Seguridad Federal de la Policía Federal en la ciudad de Buenos Aires, de los cuales 17 son desaparecidos.

Recordó que durante las dictaduras de Onganía y Lanusse estaba prohibida la actividad sindical, por lo que los judiciales formaron comisiones interfueros hasta el momento en que en 1975 el gremio consigue la personería jurídica.

"Nosotros teníamos una agrupación que tenía una intervención directa con la comisión interfueros hasta lograr el Frente Azul y Blanco, que fue la organización sindical mas importante de tribunales conducida por Wenceslao Caballero, e integrada entre otros por Nelly Ortiz, Quique De Pedro, padre del ministro Eduardo "Wado" De Pedro y Jorge Sanz. Yo era coordinador y estaba encargado de manejar nuestras posiciones en la reuniónes del cuerpo de delegados generales", explicó.

Agregó que "En 1975 en plena época de la Triple A llaman a una elección amañada porque no pudimos presentarnos por la campaña macartista desatada hacia nosotros, y participar era dar nombres de compañeros y compañeras que iban a ser conocidos por esa fuerza parapolicial. Fue una historia dolorosa con una tremenda persecución a los integrantes con muertos, desaparecidos y exiliados".

Vale señalar que el 24 de marzo de 1976 un grupo de tareas secuestra a Guillermo Diaz Lestrem, que era Defensor Oficial en la Justicia en lo Criminal, y a Carmen Argibay, secretaría de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional quien después integrara la Corte Suprema de Justicia desde 2005 y hasta su fallecimiento en 2014.

Gálligo se refirió a la figura de Díaz Lestrem, apodado "El Chino" manifestando que "fue uno de los propulsores de realizar las reformas necesarias en el poder Judicial denunciando que era vetusto, que nunca tuvo independencia ni con la política ni con las corporaciones económicas, y su rol era resguardar los intereses de los sectores de privilegio en la Argentina".

"En ese entonces ya se propugnaba que había que terminar con ese poder judical elitista, corrupto y contrario a los interes nacionales y populares", enfatizó.

Agregó que "Diaz Lestrem era la cara visible de personalidades de aquel tiempo que planteaban la reforma como Norberto Centeno, desaparecido y autor de la Ley de Contratos de Trabajo que fue la última que promulgó el presidente Juan Perón en 1974 antes de su muerte; que rige hoy y sigue siendo motivo permanente de ataques de los sectores de derecha como lo acaba de decir Mauricio Macri en su libro apuntándole precisamente a esa norma".

A su vez destacó la labor de la gremial de abogados con profesionales de notable formación como Roberto Sinigaglia, Mario Hernández, Hector Recalde, Hipólito Solari Irigoyen, y Elias Salazar de la Asociación de Abogados.

"Y fundamentalmente -remarcó- en la militancia y grupos de trabajo para impulsar una profunda reforma judicial estaban Eduardo Luis Duhalde y Rodolfo Ortega Peña, que eran nuestros conductores naturales a quienes seguíamos y en la medida de lo posible llevábamos a este debate al seno de los trabajadores judiciales".

"Ellos durante una conferencia realizada en la gremial de abogados y la asociación de abogados en plena dictadura denunciaron los crimentes cometidos en la masacre de Trelew, quienes fueron los responsables y el papel de ocultamiento que se estaba haciendo desde el Poder Judicial. Tuve el honor de estar allí con otros compañeros del gremio en una época signada por la violencia, por la violación de los princpios constitucionales y la existencia de una corporación mediática judicial como la que existe hoy con otras connotaciones", aseveró.

Respecto a los 45 años del golpe militar que se cumplen este 24 de marzo, Gállido detalló que "hay que recordar que detectados al día de hoy existieron 550 centros clandestinos de detencion siendo los mas conocidos El Vesubio, Automotres Orletti, el Pozo de Banfield y el mas siniestro la Escuela de Mecánica de la Armada en la que desaparecieron 5 mil personas, y desde donde salían los trasladados hacia los vuelos de la muerte".

"El 70 por ciento de los muertos y desaparecidos son trabajadores entre ellos militantes y dirigentes gremiales combativos principalmente peronistas, de izquierda y progresistas; que eran integrantes de las comisiones internas de los cuerpos de delegados que reclamaban a sus patronales por el cumplimiento de las leyes laborales como salarios y mejores condiciones laborales", afirmó.

"Son 30 mil desaparecidos en el país y para producir semejante tragedia existieron muchos cómplices", dijo Gálligo, y acotó que "por ello hay que tener esto muy presente en la memoria porque, entre otras cosas, con este poder judicial la democracia está renga. Es una causa importante que está muy por encima de las pertenencias partidarias".