En el programa Ahí Vamos, Luis Bruschtein dedicó su espacio al análisis de la ponencia que dio Cristina Fernández de Kirchner el viernes pasado en la causa por el Memorándum con Irán. “Fue un discurso que tuvo una audiencia altísima y puso el acento en determinados aspectos que tienen que ver con la estructura del Poder Judicial en este país”, comenzó diciendo el periodista.
La primera observación que Bruschtein destacó de la exposición de la vicepresidenta fue cómo Cristina argumentó que vivió persecución política por parte de la justicia. “En su caso en especial es más claro ese rol que cumplió el Poder Judicial. Cristina es muy clara y muy didáctica, en sus discursos se le entiende perfectamente. Y por lo general, están muy sustentados con argumentaciones sólidas. En el caso de sus causas, ella hizo un itinerario, donde habló de jueces de primera instancia. Explicó que hay dos juzgados federales , y de la cantidad de causas-que son más de diez las que le inventaron a ella- todas caían en dos jueces. Se supone que los jueces son elegidos por sorteo y no que van a consciencia. Ahora Claudio Bonadío y Julián Ercolini, que son dos jueces federales de primera instancia, si tuvieran la misma suerte que tenían con los sorteos de Cristina se hubiesen sacado el gordo de navidad. Todas las causas de Cristina Kirchner caían en los juzgados de Ercolini o de Bonadío, sobre todo de Bonadío. Y cuando no caían en estos dos juzgados, se creaban causas mellizas que terminaban llevando las causas al juzgado de ellos. Primer nivel de corrupción judicial, es imposible que tantas causas fueran confluyendo sobre dos jueces, cuando hay doce juzgados diferentes. Ahí hay una falla básica que nadie puede desconocer”, expresó.
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