Marcelo Boeykens, integrante de la Junta Ejecutiva del Partido Solidario (PSOL) en Paraná, opinó que los dueños del grupo agroindustrial Vicentín llevaron adelante “una gran estafa” ya que tienen deudas millonarias con entidades bancarias, productores agropecuarios y sus 5 mil empleados. El dirigente sostuvo que la deuda de la exportadora tiene con el Banco Nación de 18.500 millones de pesos también es con cada uno de los argentinos. Cuestionó a los que “salen a protestar en contra de una privatización”, en referencia al banderazo del pasado sábado, y sostuvo que practican “en su gran mayoría la servidumbre voluntaria”. Boeykens consideró necesaria la intervención del Estado y consideró que “aparentemente es un muy buen pedido” el que hizo el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti. “Hay que darle algún tipo de solución; es una quiebra fraudulenta y el Estado tiene el derecho de recuperar el patrimonio del erario público”, remarcó. Asimismo, manifestó que “sería una buena oportunidad para llevar adelante un modelo de empresa pública”.