En el mercado vitivinícola ya aparecieron los primeros comentarios sobre valoración de uvas que se verán reflejados en el precio que las bodegas pagarán a los viñateros en los próximos meses, y en las entidades de productores ya se pusieron en alerta. Dicen que como consecuencia de las fuertes importaciones que realizaron los grandes fraccionadores han logrado que haya un sobrestock de vino en Mendoza y San Juan, causando que a esta altura de la temporada los precios del vino estén "planchados", un mal presagio para el precio al que esperan vender la uva los viñateros. "Estamos preocupados", admitieron tanto en la Asociación como en la Federación de Viñateros, porque temen que la paga que reciban por la uva no alcance para salvar los costos. El precio de un litro de vino va de la mano con el de la uva, y teniendo en
cuenta que hace meses el litro de común en el mercado de traslado se plancho en 7,50 y 8 pesos, no es de esperar que el kilo de uva común supere los 4 o 4,50 pesos, explican los dirigentes. La cifra es muy baja frente al cálculo del sector primario que determinó que el kilo de uva debe costar 7 pesos esta temporada, teniendo en cuenta los aumentos de costos de producción del último año, de energía, transporte y mano de obra