Beatriz Barbera, titular de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica y Afines de Mendoza (AHEGA), puso un manto de calma en Aire Nacional frente a la alarma de trabajadores del sector debido a las nuevas restricciones horarias.
Sostuvo que a diferenciadel año pasado, esta etapa "nos encuentra trabajando" y que no se puede negar la importancian de restringir circulación para que bajen las transmiciones. Los restaurantes seguirán atendiendo y los más perjudicados serán los bares. En este punto, aseguró que se dialoga con el Gobierno para que se habiliten excepciones de circulación para los trabajadores de la gastronomía y para encontrar de manera mancomunada la forma de sostener los sueldos del personal que quedará ocioso.
En comunicación con Gisel Marsala y Cristian Ortega pidió mayor control del Estado sobre la clandestinidad que es donde mayor cantidad de transmisiciones se da. Apeló a la responsabilidad social ya que la crisis sanitaria y económica no se pueden saltear.
Etiquetas: gastronomía, pandemia, restricciones nocturnas