El director del Hospital Urquiza, Dr. Pablo Lombardi indicó que esta situación sucede en todo el país. Los sanatorios y clínicas privadas tienen resistencia a internar pacientes con enfermedades vinculadas a COVID, ya que es un gasto económico enorme. Estas personas necesitan 10 días como mínimo de internación, y es un gasto que no es respondido por obras sociales. Lombardi comentó que no es sencillo, y esperan que prontamente se resuelva de una manera favorable.