Durante la cobertura de LV8 en la marcha convocada por familiares de víctimas del Próvolo, Ariel Lizarraga, padre de una de las personas abusadas, reclamó que “una vez más se pide que declaren las víctimas”. En el programa Muchas Gracias, se preguntó: “si existen cámaras gesell por qué se solicita una vez más que revivan situaciones tan traumáticas. Aseguran que las cámaras no son visibles, no han sido buenas grabaciones. El tribunal decidió que no se puede dar información a la prensa y por eso hemos mantenido silencio hasta ahora. Si hay que seguir el camino duro lo seguiremos, pero si mi hija no está en condiciones de seguir no lo hará”.
Por otra parte, Lucas Lecour, abogado querellante por parte de varias víctimas, relató las dilaciones y situaciones conflictivas que deben enfrentar las víctimas o los familiares que muchas veces no están en las condiciones económicas para trasladarse. “A ello hay que sumarle que muchas víctimas se descomponen luego de declarar.
Algunas de las cámaras gessell no se oyen bien, fueron mal grabadas. Y en otras oportunidades ocurre que no participó la defensa de esa cámara gesell y no han podido hacer preguntas. Pero siempre hay que observar cómo está la víctima psicológicamente”.
Los familiares están pidiendo un trato digno, un lugar donde estar tranquilas, darles un café, en algunos casos la presencia de un profesional que acompañe. “Hay una intención clara de demorar la causa por parte de la defensa de las monjas. A ello se suma que la justicia no está preparada para llevar adelante estos casos. Tampoco se preocuparon de reunirse previamente con las víctimas o con personas que supiesen de la temática y ahora ven que no saben cómo resolver las problemáticas que se presentan”.