Ángel Almada falleció en marzo de 2016 mientras era asistido en el Hospital Municipal, luego de haber caído desde un puente peatonal en Ingeniero White. Según sostienen sus familiares, esto se produjo en circunstancias en las que el chico fue lanzado al vacío. Una primera causa que investiga su deceso es llevada adelante por el Fiscal Marcelo Romero Jardín, titular de la UFIJ N°8.
Como consecuencia de ésta, la Jueza de Garantías subrogante Claudia Olivera resolvió elevar a juicio otra realizada por el mismo Fiscal pero, por mal desempeño de los encargados de establecer la muerte del joven.
En coincidencia ambos advirtieron graves omisiones y acciones, entre ellas: no preservar el sitio del hecho, no anoticiar al representante del Ministerio Público inmediatamente para que diera las directivas a seguir, insertar frases falsas en declaraciones testimoniales receptadas en sede policial e intentar "sostener irresponsablemente la hipótesis del suicidio descartando otras líneas posibles de investigación".
La calificación legal abarcaría: encubrimiento agravado por delito grave y falso testimonio agravado por su comisión en una causa criminal (Cintia Cerdeiro y Héctor Horacio Pagotto); incumplimiento de los deberes de funcionarios policiales (Andrés Emir Mansilla, Gustavo Federico Ceballos, Marcelo Fabián De La Rosa, Claudia Elizabeth Olivera y Ayelén Magali Ayala) y usurpación de título u honores (ex delegado municipal Marcelo Acosta).
Al ser entrevistada por Mañana Nacional Silvia Almada, madre de Ángel, se expresó sobre esta resolución