-Una demora de casi medio siglo no es inocua: perdimos a las personas y a los familiares. Por eso rescato a los que pudieron superar el miedo y el silencio y concurrieron a declarar -dijo el fiscal Pablo Fermento.
Así empezó su alegato en el juicio contra Juan Carlos Curzio, Osvaldo Omar Pallero, Héctor Ángel Forcelli y Raúl Roberto Aceituno, acusados de haber pertenecido a la Triple A y, en el caso de Aceituno, de ser uno de los autores del asesinato del estudiante y militante estudiantil David “Watu” Cilleruelo.
Hoy se inició la instancia de alegatos en esta causa en la que a los imputados se les acusa de pertenecer a esa organización paraestatal que sería culpable de 24 asesinatos en nuestra ciudad y entre 700 y 1.100 en toda la Argentina entre 1974 y 1975.
Además de Fermento, los otros fiscales son Miguel Ángel Palazzani y José Alberto Nebbia. Además los querellantes son HIJOS Bahía Blanca, la familia de la víctima Luis Jesús García y la Universidad Nacional del Sur (UNS).
Los jueces son Roberto Amabile, Marcos Aguerrido y Pablo Díaz Lacava.
-Según el testigo Fortunato Mallimaci, en esos tiempos se empezó a naturalizar la muerte. Y prueba de ello es que en ese año hubo 2 muertes por mes en Bahía Blanca. Fue un período en el que ‘nos acostumbramos a vivir sin justicia', porque lo natural era que no se investigue ni se juzgue –agregó Fermento en su alegato.
En el inicio de su alocución, Fermento dejó en claro la alianza entre el diputado Rodolfo Ponce –secretario general de la CGT y uno de los señalados como artífice del accionar de la Triple A- y la familia Massot, dueños del diario La Nueva Provincia.
Señaló varios editoriales en los que el diario dejaba de manifiesto su pedido de intervención en la Universidad Nacional del Sur para “terminar con el marxismo”.
Mostró un editorial titulado “UNS: una aviesa maniobra del marxismo triunfa otra vez” publicado en 1975, en el que se pedía hacer listas de alumnos implicados en movimientos denominados “de izquierda” y la intervención de la universidad, poco tiempo antes de que fuera designado el rector rumano Remus Tetu, quien ordenó el crimen del estudiante David “Watu” Cilleruelo, y al que se le comprobó haber pertenecido a la Ustacha croata, una organización terrorista aliada al nazismo.
Entre otro de los editoriales mostrados por el fiscal, hay uno que no deja dudas: “Muchos de los que hoy se lamentan, están recogiendo lo que sembraron”, dando autoridad a los asesinatos de estudiantes o gremialistas que se sucedían en Bahía Blanca.
-La Nueva Provincia no informaba, adelantaba lo que iba a suceder –manifestó Fermento.
También en los editoriales del diario se menciona a La Fiambrera, un vehículo indudablemente conectado a las asesinas recorridas nocturnas que hacían los integrantes de la Triple A, en busca de personas que, en muchos casos, luego aparecían asesinadas.
Fermento argumentó que esta conexión entre Ponce y La Nueva Provincia –grupo propietario del único diario, la radio más escuchada y el canal con más rating- “naturalizaba” un accionar irregular por parte del Estado.
Fermento también hizo una conexión entre los bombardeos de 1955 en la Plaza de Mayo por parte de la Armada contra el gobierno constitucional de Juan Domingo Perón y lo sucedido en los 70 en la Argentina, como una “naturalización del terrorismo de Estado”.
Mencionó en su alegato al primer crimen de la Triple A en Bahía Blanca: el homicidio del militante Luis Jesús García, “Negrito”. García fue secuestrado de su casa del barrio Noroeste y apareció asesinado en un descampado de General Cerri.
Dijo también en un pasaje de su primer día de alegato, que duró más de 2 horas, que los acusados en este juicio eran personal contratado por la Universidad Nacional del Sur dirigida por el nazi Remus Tetu.
Además de los imputados, Fermento fue mencionando la vinculación de otras personas, a las que se veía junto a los acusados, con la Triple A como el ya nombrado Ponce. Entre ellos señaló a Jorge “Moncho” Argibay -quien hizo el disparo contra "Watu"- y su hijo Pablo, los hermanos Héctor y Miguel Ángel Chisu. Héctor, apodado “Ginebra”, también estaba entre los acusados por este juicio pero falleció en diciembre de 2019.
Foto: "Ginebra" Chisú
-En 1972 Bahía estaba categorizada como la subzona 51. Ya se apuntaba contra el estudiantado universitario y secundario. Había un esquema represivo. Y muchos de esos integrantes de la Triple A, luego pasaron al Ejército genocida que actuó en la dictadura de 1976.
Y agregó sobre Ponce: “Era el encargado de la ‘limpieza’ en Bahía”.
El alegato de la Fiscalía continuará mañana desde las 8.30 y se puede seguir por el canal de Youtube de la Universidad Nacional del Sur.
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