Cada 30 de septiembre se conmemora el Día Internacional de Concienciación sobre el TEL. El Trastorno Específico del Lenguaje (TEL) es una alteración de los mecanismos de adquisición del lenguaje (alteraciones del lenguaje y/o habla, enlentecimiento del mismo) desde sus inicios, que se prolonga durante la infancia y la adolescencia, pudiendo llegar a dejar secuelas en la edad adulta, y ésta alteración no está asociada a otros diagnósticos, aunque realmente pueden estar presentes, no están relacionados. Mariel Bordenave, licenciada en Fonoaudiología, se refirió al tema y mencionó que es complejo identificarlo ya que parecería “un trastorno invisible y sólo quienes están alrededor de las personas que lo padecen pueden visualizarlo”. La especialista, contó que el TEL se da desde la primera infancia. “Estos niños no acusan ningún trastorno físico, ni orgánico, ni tampoco han padecido alguna enfermedad y tampoco una patología del sistema nervioso, que nosotros podríamos conectar”, expresó.

Bordenave explicó que muchos casos se pueden observar cuando ingresan al jardín maternal y “son niños que a los dos años no han comenzado a hablar”. Advirtió que no se debe acudir ni a un especialista de la pedagogía o de la psicología, es el fonoaudiólogo quien atiende dicha patología. También, indicó que otras de las situaciones que se pueden dar en los niños y niñas es falta de comprensión y “puede darse un problema de conducta por la falta de comprender o de ser comprendidos” en lo que intentan comunicar. Cuando la consulta es demorada, luego pueden darse problemas para el aprendizaje de la lectura y la escritura.