Patricia Isasa, militante de organismos de Derechos Humanos de Santa Fe, exdetenida desaparecida durante la última dictadura cívico militar, dialogó en Nacional Santa Fe. Ayer, la Cámara de Diputados de la Nación aceptó que concurra como testigo en el pedido de juicio político contra el exintendente de Santa Fe, hoy juez Horacio Rosatti.
"Tengo la sensación de que a la larga o a la corta todo llega, la verdad se impone. Aunque lo traben algunas cosas, como algún grupo de diputados cómplices con la mentira o con la falta de ética", reflexionó.
"Lo importane es que lo sepa toda la sociedad, la poca ética y moral que tiene esta persona (Horacio Rosatti) y sobre todo que la Corte Suprema debe estar integrada por gente con probidad, que las hay, hay grandes hombres y mujeres especialistas, académicos que han escrito libros. Esta runfla en algún momento se irá y tendremos la Corte que nos merecemos".
Con respecto al impacto que tiene en la sociedad el tipo de personas que integran una Corte Suprema, Patricia Isasa expresó "Nos quieren obligar a vivir entre gente que nos hace padecer como cuando nos cobran un montón de dinero para el cable o vivir entre represores que liberan impúnemente aunque hayan cometido crímenes aberrantes por los cuales fueron condenados".
Isasa recordó que Rosatti la recibió cuando fue intendente y a pesar de que le explicó que su empleado, el secretario de cultura de la Municipalidad de Santa Fe, Eduardo "Curro" Ramos, incumplía puntos básicos del estatuto municipal ya que era una persona condenada por crímenes aberrantes, Rosatti aún así no hizo nada. "Me escuchó y, siendo abogado, entendiendo perfectamente lo que le estaba diciendo, no hizo nada, lo mantuvo con él en la Municipalidad"
La novedad en este caso fue que en el día de ayer, la presidenta de la Comisión, la diputada Carolina Gaillard, explicó que Isasa podrá ir a declarar y llevar la documentación que avala sus dichos. "Yo hice un gran trabajo de investigación que está reflejado en tres documentales", detalló Isasa.