Sergio Mancini es licenciado en Filosofía y Ciencias Sagradas, estuvo al frente de la parroquia de San Cayetano en Barrio Altamira de la ciudad de Córdoba. En diciembre de 2018 dio su última misa como sacerdote. No promueve el aborto pero siendo cura entendió que cuando una mujer ha tomado la decisión de interrumpir su embarazo, lo hace y no se puede abandonarla a su suerte. "Un verdadera mirada amorosa sobre las personas las acompaña, decidan lo que decidan”, dijo en diálogo con Radio Nacional Córdoba.

El ex cura contó que le llevo mucho tiempo comprender que su postura personal y creyente, contraria al aborto, no tenía que ser la misma que tome el estado. "Hoy vivimos en una sociedad muy plural, donde conviven muchas cosmovisiones. El estado tiene que tener en cuenta todas y legislar para toda la sociedad". Cuenta que una de las experiencias que "le abrieron los ojos y el corazón" fue la una joven que en una situación de vida muy difícil había decidido interrumpir su embarazo y a la que no pudo convencer de lo contrario.

Además señaló que no es el único y que, aunque no lo digan públicamente, dentro de la iglesia hay muchas personas que se preguntan que hacer ante estas situaciones. Finalmente se mostró a favor de "que se encuentre la mejor manera de que el estado proteja a las mujeres en esta situación, sobre todo de ámbitos vulnerables".

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