El trágico hecho ocurrió en Paraná. Según se informó, mientras la madre hacía distintas tareas el niño caminó hacia la pileta y cayó al agua. El pequeño fue trasladado al Hospital San Roque pero no pudo ser salvado.
Un lamentable suceso se registró en la tarde noche del miércoles en la zona este de Paraná, donde en un aparente descuido, un bebé de un año y medio, falleció al caer en una pileta de fibra de vidrio instalada en el fondo de la casa.
La mujer solicitó ayuda a los vecinos y un policía que vive en la zona colaboró en el traslado del pequeño hasta el hospital San Roque.
En el camino la mamá le realizó RCP, y una vez en el nosocomio materno infantil, y pese al esfuerzo de los médicos, se confirmó el deceso a los pocos minutos.