Durante el último mes, los habitantes del sector ubicado en el oeste de la ciudad, manifiestan su preocupación por el crecimiento de ilícitos.
Generalmente ocurren cuando las casas están vacías y en horas de la tarde.
Según explicaron, estas situaciones se dan en breves lapsos de tiempo, cuando salen por trámites o compras.
“Parece que nos están vigilando”, sostuvo Laura de la Rosa, vecina del barrio.
En las últimas semanas se registraron robos en distintas calles, durante el horario de la siesta.
Un damnificado explicó que dos noches atrás, le rompieron el portón de su casa y una mujer vio como tres personas intentaron ingresar a su domicilio y huyeron cuando se dieron cuenta que la casa no estaba vacía.
Esta situación hizo que comenzaran a organizarse como "vecinos en alerta" para cuidarse entre ellos; realizaron una nota dirigida a la Defensoría del Pueblo, solicitando intervención y articulación con el municipio y la provincia para llegar a una solución efectiva.