La filosofía derecho-libertaria extrema postulados liberales hasta el grotesco. Pero el “libre albedrío” implícito en la autonomía de la voluntad para decidir –en situación de extrema necesidad- vender un brazo y morir de hambre que exclama a los gritos, está presente en la meritocracia macrista: triunfa quien se lo propone. Y es ideología de una clase media que la sociología jauretcheana definió como “tilinga”.

Un medio pelo que se cree intelectualmente superior a los pobres, no obstante su flagrante ignorancia. Jorge Drexler le explica y canta a esta franja social y sus referentes mediáticos y políticos las complejidades del “hacer lo que se quiere”.

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