BEATRIZ SARLO VIDAS PRESTADAS

"Para ser docente tuve que aprender a dominar la ironía"

Durante mucho tiempo fue docente, ensayista, crítica literaria. Desde hace ya también bastante tiempo, Beatriz Sarlo ejerce una singular modalidad del periodismo de análisis, mientras sigue trabajando con el ensayo como género, a lo que sumó además memorias de viajes y textos más urgentes de periodismo político. Antes y después de tanto estudio y tantos libros, su personalidad militante la fue llevando a lo largo de una deriva amorosa e intensa por diferentes movimientos del campo político y, a fuerza de lucidez y una capacidad argumentativa extraordinaria, supo ganarse un espacio propio con la palabra, una palabra que siempre -aún para la descalificación- es una palabra que pesa, que influye, que deslumbra o que enoja.

Autora de libros capitales de la crítica y de decenas de libros sobre literatura como Una modernidad periférica, El imperio de los sentimientos, La imaginación técnica, Borges, un escritor en las orillas, Escritos sobre literatura argentina, fue durante 30 años directora de la histórica revista Punto de vista, titular por dos décadas de la cátedra de Literatura argentina II en la carrera de Letras de la UBA, Sarlo es quien desde la academia y los libros ayudó a consolidar un canon, una serie de autores y textos privilegiados que naturalmente puede ser cuestionable pero que, en definitiva, dicta un orden de calidad con argumentos sólidos y pone de relieve los nombres de la literatura local.

Recientemente la editorial Siglo XXI acaba de publicar sus Clases de literatura argentina, con edición de Sylvia Saitta, la actual titular de la cátedra que condujo Beatriz desde el regreso de la democracia y por veinte años. Se trata de clases dictadas durante el período 1984-1988, que, así ambicioso como suena, sentaron las bases de nuestros modos de leer.