Gloria Almada, vecina del tradicional barrio de pescadores, dijo que el río Paraná viene creciendo y eso afecta principalmente a los habitantes que tienen sus casas construidas sobre la barranca, en tanto, quienes tienen viviendas elevadas no sufren inconvenientes. “La gente de abajo está sobre la tierra y sufre filtraciones”, explicó. Asimismo, señaló que los pescadores que están siendo afectados porque tienen que continuar por trabajo en la costa del río.