Presa desde enero de 2016, la dirigente social y líder de la organización Tupac Amaru, Milagro Sala, dialogó con Radio Nacional y celebró que con el gobierno de Alberto Fernández “la Justicia comenzará a ser independiente y esta agonía va a terminar”. En ese sentido, dijo estar viviendo una “injusticia” y destacó que “al haber un poder judicial independiente no se armarán causas a políticos opositores” como ocurría durante la gestión de Mauricio Macri, según explicó. Además, relató cómo vive y señaló: “La prisión domiciliaria que tengo tiene más controles que un genocida”.

En Verano 2020, defendió el trabajo realizado por su organización y expresó: “Nosotros dignificamos a los que menos tienen y eso es lo que a muchos de la derecha no les ha gustado”. “A Blaquier, a los grandes empresarios de la construcción y minería, que son amigos de Gerardo Morales, les conviene que yo siga presa porque sienten que si recupero la libertad soy una amenaza para ellos, porque no podrán seguir robando”, explicó.