En la primera edición del Panorama Nacional, Mario habló sobre el avance del plan de vacunación en el país, de las dificultades económicas que complican la actualidad argentina y las políticas que se ejecutan para contener dichos problemas.
“Con el consumo retraído, la voracidad de la remarcación y la picardía de los precios cuidados con productos que no están o el cambio de peso o de envase, siguieron apretando el bolsillo. Por eso van a continuar y serán más estrictos los controles. Hoy se espera el nuevo plan ganadero. Una etapa superadora de las medidas coyunturales para intentar recuperar la posibilidad de consumo interno de carne. Es que mientras la producción se halla estancada en el tiempo, la población del país aumentó. Pero las posibilidades de exportación seducen a los frigoríficos centrales, en perjuicio del acceso a precio razonable para el consumo interno. En el año 2006 Néstor Kirchner también ordenó un cese de exportaciones y los precios inmediatamente bajaron. Los colegas consultados destacan que en aquel tiempo Argentina no estaba jugando en el mercado internacional por lo tanto, el negocio exportador hoy está asegurado debido a que los cortes congelados que compra Beijing, no se consumen en el país. Por eso, hace falta un proyecto de extensión temporal que satisfaga a todos los actores de la cadena pero que incluya al consumidor final local. Se reabre la exportación pero se garantizan cortes populares, una suerte de regreso al sistema de cupos que estuvo vigente entre 2011 y 2015. No le va a gustar a la Mesa de Enlace. Como con la vacuna y la carne no alcanza, se viene impulsadas por el Poder Ejecutivo, nuevas revisiones a los acuerdos paritarios. Por ejemplo, en estos días pasan por el ministerio de Trabajo, sanidad, alimentación y bancarios. Con la referencia de superar el 40 por ciento de aumento y revisiones antes de que termine el año. Tienen la referencia de mayores porcentajes con los que acordaron en cuotas: los camioneros, los de Congreso, Anses y PAMI. El retroceso en el tema del monotributo que Diputados piensa tratar esta semana, se suma a la modificación del mínimo no imponible de ganancias. Recursos que van derecho al consumo. Son alrededor de 70 mil millones de pesos junto al alivio de los monotributistas. Como motor inmediato de la economía no quedarán afuera los anuncios para jubilados y pensionados con haberes más bajos, para quienes más allá de la fórmula vendrá un bono de más de 6 mil pesos. Algunos dicen 8 mil, que será anunciado de nuevo en estos días. El bono compensará la diferencia entre el aumento oficial y la inflación del primer semestre del año. Pisar la inflación, y empujar para que se registren nuevos descensos, también está en el paquete esperado. Consultores por fuera del gobierno, ya calculan otra baja en junio. Indicativo de un proceso de freno a los aumentos descarnados. Se monitorea además el comportamiento del plan Súper Cerca, la canasta de 70 productos en el almacén del barrio”, expresó.