La firma del acuerdo entre el gobernador Rodolfo Suarez e YPF para llevar adelante perforaciones en el sector de Vaca Muerta en Malargüe revitalizó un viejo reclamo de sectores ambientalistas de Mendoza contra el fracking.
El fracking o fractura hidráulica es un método de extracción de shale o petróleo no convencional, en rocas reservorios, resistido y repudiado desde ámbitos académicos y ambientalistas por el fuerte impacto ambiental que genera.
En Mendoza, esta práctica extractiva se puso en vigencia con un decreto del ex gobernador Alfredo Cornejo que habilitó en 2018 la fractura hidráulica en la provincia, más allá de la oposición de vastos sectores.
Esta última semana, con la novedad en torno al avance de explotación de shale en la inmensa reserva de Vaca Muerta en el sur mendocino, se reactivaron las movilizaciones, por eso miles de mendocinos y mendocinas marcharon este viernes en rechazo al fracking en Mendoza.
Mendocinos y mendocinas se manifestaron por las calles céntricas rumbo a la Legislatura bajo la consigna "Mendoza libre de fracking".
Varios son las razones de la oposición a dicha práctica extractiva, entre ellas los pasivos ambientales, los químicos utilizados en la inyección hidráulica y el uso de un recurso escaso en Mendoza como lo es el agua.
Pero, además, científicos advierten sobre la sismicidad inducida, y para ello basta citar el caso de las localidades del norte neuquino Añelo y Sauzal Bonito.
En esa zona, colindante a Vaca Muerta, se registran temblores diarios, muchas veces imperceptibles, pero incluso de gran magnitud, como el ocurrido en Añelo en 2015 que llamó la atención de la prensa y las autoridades.
Según publican medios neuquinos, tras los relevos de institutos sismográficos argentinos y chilenos, han llegado a percibirse 42 eventos telúricos en una semana, a razón de 8 diarios, en esas localidades distantes 24 km de pleno corazón de vaca muerta.
Lo que llama la atención de los científicos es que una zona que no era sísmica, ahora lo es, con fuerte presencia de temblores y movimientos telúricos, que se multiplican desde 2015.
El origen lo vinculan directamente al efecto del fracking. Así lo exponen los investigadores y sismólogos del CONICET Sebastián Correa Otto y Silvana Spagnotto, quienes se han abocado profusamente a la investigación de los sismos en Sauzal Bonito y Añelo.
¿Qué tiene que ver el fracking con la ocurrencia de sismos en las zonas cercanas a las explotaciones no convencionales? Te lo explicamos en esta nota de Cruce de Palabras.