Doce precandidatos y precandidatas a jefe y jefa de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires competirán el domingo 13 en las elecciones porteñas en las que más de 2.500.000 personas estarán habilitadas para votar con una modalidad inédita en el distrito, que combinará la boleta de papel para los cargos nacionales y la electrónica para las categorías locales. El especialista en seguridad informática advierte sobre la falta de seguridad de este sistema que Horacio Rodríguez Larreta decidió implementar para CABA. “Con este tipo de sistema hay que creer o no que el secreto del voto esté garantizado”.

Javier Smaldone argumentó las complejidades que conlleva este tipo de votación que, explicó, países como Alemania, Francia y Estados Unidos implementaron pero dejaron sin efecto: “está en retroceso no en avance”, indicó.

Advirtió que la boleta electrónica, pese a las versiones contrarias, “tiene chip” y la máquina que se emplea “es una computadora compleja que no tiene disco duro con lo cual al apagarla toda la información se puede perder”.

Consideró que, en el caso de la ciudad de Buenos Aires, “las cosas no se han hecho bien, hay que ir a votar, cuidar el voto” y asegurarse que la boleta impresa “coincida con lo que realmente elegimos” y, de lo contrario, “ante la menor duda pedir otra”.

El especialista reconoció que “se pueden usar sistemas informáticos” pero explicó que “para la emisión del voto no hay nada más seguro que votar usando boletas de papel”.

El procedimiento de Boleta Única Electrónica que se empleará en CABA implica la selección de los candidatos a través de una máquina con pantalla táctil para luego imprimir la boleta, que se coloca en la urna de la mesa de votación, en tanto que el sistema permite elegir una lista completa, votar por categorías, anular el voto o votar en blanco.

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