El ATP de Buenos Aires se acerca a su vigésima edición y debe reinventarse cada año por que, si bien es un torneo internacional, el único evento deportivo de un circuito mundial con tamaña continuidad, en las últimas temporadas perdió algo de atractivo y se notó en la venta de tickets.
Pasaron muchas cosas desde aquella primera edición en el 2000 hasta ahora. Muchos jugadores. Muchas estrellas (Rafael Nadal y Gustavo Kuerten entre muchos). La Legión en su momento más brillante. La materia pendiente es Juan Martín Del Potro (sólo jugó muy joven, una vez. Su distanciamiento con el director del torneo, Martín Jaite, le juega en contra al ATP).
Ya sin figuras locales como Gastón Gaudio, David Nalbandian, Guillermo Coria o Guillermo Cañas, entre muchos, hay que buscar el atractivo foráneo.
Marin Cilic y Dominic Thiem, quinto y séptimo del ranking respectivamente, liderarán la lista de participantes de la edición 2018. Para un torneo ATP250 es excelente tener a dos Top-Ten.
El croata, campeón de Flushing Meadows en 2014, jugará por primera vez el torneo mientras el austríaco ya fue campeón en el Buenos Aires en 2016.
A ellos se une el francés Gael Monfils quien, pese a quedar lejos de los tops, hoy está más allá del casillero 30, es un jugador muy atractivo.
Puede haber más novevades? Por su puesto. La cercanía del ATP500 de Río de Janeiro una semana después puede traccionar a algún jugador más a último momento. Será cuestión de esperar. Pero la apuesta, de Miguel Nido (dueño del ATP) y su equipo siempre es buena.
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