Entrevista a Marcelo Settimo

“Tita de Buenos Aires”: el emprendimiento argentino que crece en Madrid

En los últimos años, la gastronomía argentina ha ganado un espacio destacado en Madrid, donde cada vez más locales ofrecen productos típicos del país. Uno de los exponentes de este fenómeno es “Tita de Buenos Aires”, un emprendimiento que nació en 2020 y que en 2025 ya cuenta con doce establecimientos en la capital española, consolidando su presencia en el mercado.

 

El dueño de “Tita de Buenos Aires”, Marcelo Settimo, dialogó con Ramos generales y destacó que el crecimiento del proyecto responde a la fuerte demanda de productos argentinos en España. Junto a Ana Antolini, logró posicionar sus empanadas y otros clásicos como los sándwiches de miga y los alfajores de maicena, sumando además un espacio exclusivo con productos importados, entre ellos vinos mendocinos, chimichurri y yerba mate.

"Los españoles nos tienen una alta valoración a los argentinos. Al emprendedor que viene con la gastronomía argentina lo ven muy bien. Nuestros productos se han incorporado a los hábitos de consumo de los españoles", resaltó.

El modelo de negocio de “Tita de Buenos Aires” se basa en la combinación de tradición y calidad, ofreciendo una carta que mantiene las recetas originales con un proceso de producción adaptado a las exigencias del mercado europeo. El éxito del emprendimiento ha llevado a sus fundadores a evaluar nuevas oportunidades de expansión, en un contexto donde la cocina argentina sigue ganando protagonismo en el exterior.

"Nuestras recetas son las tradicionales. Las empanadas más vendidas son las de carne y después las de queso. Nos asombró que acá se consume mucho las empanadas de pollo al curry", señaló.

En sus locales, la propuesta no solo apunta a la comunidad argentina residente en Madrid, sino también al público español, que cada vez muestra mayor interés por la gastronomía del país. La aceptación de sus productos ha impulsado su crecimiento y afianzado su identidad en el competitivo mercado gastronómico de la capital española.

"También hacemos postres caseros, con la chocotorta nos va muy bien; aunque el español no es muy dulcero", dijo.