HASTA SIEMPRE, COMPAÑERO ICA NOVO

Una noche esta pequeña Tierra se detuvo. Simplemente dejó de girar. Las luces de tantas ciudades se apagaron, la Música enmudeció  y los pájaros en los árboles dejaron de cantar. Murió nuestro compañero, Ica Novo.

Durante más de un año Ica nos deleitó con su maravillosa columna de Una Noche en la Tierra. Con sus anécdotas y recuerdos, con sus  cantares y decires en “Las Crónicas de Novo”. Siempre el corazón tibio, arropado por sus pagos amados: Dean Funes y Barcelona. Vamos a extrañar tu clásico “buenas noches, terráqueos”. Vamos a echar de menos tu bohemia cordobesa, el entusiasmo de tantos planes resonando en tu voz inconfundible desde el otro lado del teléfono, la alegría por alguna canción que tu pluma de artista había parido. Y a tu bombo y a tu guitarra, que otras manos ya no podrán tocar.

A lo mejor Ica Novo no se murió. Tal vez sólo fue a visitar a La Negra Sosa para llevarle hasta El Cielo una nueva canción. Así, con ese entusiasmo que lo caracterizaba. Con su sombrerito y la barba. Y los tamangos lustrados que se ponía cuando la peña lo ameritaba. Y de seguro la Tierra volverá a girar, otra vez se encenderán las luces de tantas ciudades, y la música sonará de nuevo.

Pero lo cierto es que cuando un pájaro deja de cantar no existe nada que pueda reemplazarlo.

Hasta más vernos, querido compañero Ica Novo. ¡Y mándese otra zamba!...

(Graciela Guiñazú y Eduardo Barone desean enviarle un profundo y sentido pésame a Salvador Novo, tu hijo amado).